El alcalde cerreño, Manuel Vera Paredes, aún no puede librarse de la denuncia por lavado de activos que ocasionó que el 29 de setiembre del 2022 sea sentenciado a 10 años pena privativa de la libertad.
La Fiscalía no le ha creído que sus recursos provenían de la venta de patos pekineses y por el contrario se presume que el enriquecimiento ilícito habría sido durante su gestión del 2013.
El Ministerio Público ha pedido como autor del delito de lavado de activos que le impongan 10 años y 4 meses de pena privativa de la libertad y 197 días multa.Además, se fijó por concepto de reparación civil el monto de S/ 186 976.
Junto a él, por la compra de un automovil valorizado en más de 10 mil dólares están acusados como complices dos personas más. Se trata de Jacinto Coaquira Quispe y Juana Cutipa Vilcazano, quienes por haber participado como cómplices primarios se ha solicitado para cada uno 8 años de pena privativa de la libertad y 120 días multa.En el caso de la reparación civil se fijó que de manera solidaria deberán abonar la cantidad de S/39 900.
La denuncia se basa que en el año 2012 Vera Paredes ingresó 100 mil soles al Banco de Comercio sin informar a la Contraloría. Asimismo, en el 2009 adquirió un bien inmueble por 82 mil soles que puso a nombre de sus hijos, así como la compra de un auto.
El caso fue archivado durante el 2015 y fue reabierto dos años después, pero en el 2018 se solicitó 9 meses de prisión preventiva para él y su esposa, Carmen Espinoza Delgado, luego de un allanamiento en su vivienda. Sin embargo, a los meses el juez decidió que afrontará en libertad el proceso de lavado de activos.
Finalmente, el año pasado fue sentenciado y ahora Vera Paredes está a la espera que se ratifique o se absuelva la pena que se le impuso en el Segundo Juzgado Penal Colegiado Supraprovincial de la Corte Superior de Justicia de Arequipa (CSJA).
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