Brayan Paul Quispe Sanca (20) fue encontrado muerto en uno de los baños del Centro Juvenil de Diagnóstico y Rehabilitación Alfonso Ugarte. Tenía una lesión contusa en la cabeza y el cuerpo calcinado, luego del incendio que se desató al interior de este reformatorio la noche del último domingo.
La Policía y el Ministerio Público investigan la muerte. Una de las hipótesis, es que el joven, en su desesperación por intentar salir, se tropezó y cayó al suelo en los servicios higiénicos del Programa Dos. La Policía tampoco descarta que haya sido víctima de agresión por parte de otros internos. La necropsia de ley que se practicará al cuerpo del occiso será clave para esclarecer el motivo de su muerte.
Quispe Sanca (20) es natural de Puno. Fue trasladado hasta este centro juvenil por estar inmerso en una denuncia por el delito de violación sexual, cuando era menor de edad.
MOTÍN. El domingo 3 al promediar las 9:00 horas, un grupo de internos se amotinaron, quemando colchones y otros objetos. Se presume que el motivo era para evitar que tres internos que tenían mayoría de edad sean trasladados al penal de Socabaya para cumplir su condena.
El siniestro dejó tres heridos: Luis Enrique Campos Hurtado (17), Jhon Acero Acero (22) y el trabajador del centro, Billy Chávez Mendoza (40). Ingresaron al hospital por inhalación de humo y fueron dados de alta hora después. En un comunicado, el Programa Nacional de Centros Juveniles (Pronacej) del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos informó que han dispuesto también, una investigación exhaustiva de los hechos.
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