Con intenciones de llegar hasta la frontera con Bolivia, dos integrantes de la banda criminal “Los Chukys del Callao” fueron detenidos por agentes de la Policía en el puente Ocoña. El 6 de febrero, los sicarios arrebataron la vida a seis miembros de una familia, entre ellos, dos menores de edad de 10 y 12 años, en el distrito limeño de San Miguel.
Los sicarios identificados por la Policía como José Henry Presiado Alegría, alias “Josesito” y Fabricio Vera Díaz, alias “Fabricio” viajaban en un bus de la empresa Cosmos Perú, tratando de huir de la justicia, por la localidad de Ocoña.
Sin embargo, tras arduo seguimiento de la Dirección de Inteligencia de la Policía Nacional del Perú, se dio con su paradero.
Al ser detenidos, los facinerosos clamaron a los efectivos del orden para que no se grabe sus rostros. “Por favor, no nos grabes, jefe, porque nos van a ‘bajar’ a los dos”, suplicaron los que dispararon reiteradas veces a Israel San Román Doroteo, alias “La Tota” y familia.
Los sujetos registran antecedentes policiales, “Josesito” tiene un historial de robo agravado y tenencia de arma de fuego y “Fabricio”, robo agravado y dos ingresos al penal Sarita Colonia. Hace días atrás se capturó a José Carlos Solari Pozu, de 23 años, alias “Charly”, conductor del vehículo. Según investigaciones de la PNP, se sabe que los sicarios cobraron S/10 mil soles al autor intelectual. Además, los motivos del horrendo crimen serían por la lucha del control de obras de construcción en Lima.