Arequipa. Los proyectos mineros paralizados desde el 2007 al 2022 generaron un pérdida al Perú de S/700 mil millones, según el presidente del Instituto de Ingenieros de Minas (IIMP), Abraham Chahuan.
Según el especialista son 23 proyectos que no se ejecutaron en ese lapso. Resaltando entre uno de los más principales el de Tía María, en el valle de Tambo, que no se ejecuta por conflictos sociales.
El factor principal de las paralizaciones en obras mineras es el rechazo de la población, pero también los permisos retrasan el proceso pues demoran hasta tres años.
A la fecha se requieren hasta 43 permisos, licencias y autorizaciones. Ante este problema, desde el Gobierno anunciaron la implementación de la Ventanilla Única Digital que permitirá potenciar los procesos de certificación ambiental.
El dinero no es lo único que se perdió, también fueron 666 mil empleos lo que provocó que no se reduzca la pobreza, explica Chahuan.