Al menos media docena de perritos que vivían en la torrentera que separa Miraflores de Alto Selva Alegre, a la altura de la calle Alto Perú, fueron envenenados por gente inescrupulosa.
Según refieren voluntarios animalistas, las personas que realizaron este cruel acto se llevaron a los cachorros de una de las perritas envenenadas y solo dejaron viva a otra que estaba esterilizada. En otro sector, por el puente José Olaya, todos los animales también fueron envenenados.
Según la ley n.°º 30407, Ley de Protección y Bienestar Animal, «El que comete actos de crueldad contra un animal doméstico o silvestre, o los abandona, es reprimido con pena privativa de libertad no mayor de tres años, con 100 a 180 días-multa”.
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