Escrito por: Yenice Chavez Flores
Las extorsiones en su modalidad de cobro de cupos se convirtió en una de las mayores amenazas que sufren los comerciantes arequipeños. Solo en los primeros cuatro meses de 2025, la Divincri registró 165 denuncias en la región (ver cuadro), de los cuales entre enero y marzo solo 38 fueron resueltos (detuvieron a los delincuentes).
A nivel nacional, los datos de la Policía indican que entre enero y marzo se presentaron 820 denuncias por esta misma modalidad, lo que confirma su expansión en todo el país.
TRES BANDAS SE DISPUTAN LA CIUDAD. Según el jefe de la Región Policial Arequipa, general Ólger Benavides, Arequipa soporta la presencia de tres bandas criminales —entre ellas “Los Gallegos”, “Los Orientales” y una tercera aún no identificada—, los delincuentes se dividieron territorialmente la ciudad para extorsionar a negocios, especialmente en zonas como Mariano Melgar, Alto Selva Alegre, José Luis Bustamante y Rivero.
VICTIMAS EXPUESTAS POR MOSTRAR SU NEGOCIO EN REDES SOCIALES. Según la Divincri, en el distrito de Cercado se concentra la mayor cantidad de víctimas, especialmente en áreas comerciales y mercados. Los extorsionadores atacan principalmente a pequeños empresarios y comerciantes que publican sus servicios o productos en redes sociales, dejando visibles sus números de contacto.
El criminólogo especializado en seguridad ciudadana, Guido del Carpio, explica que estas personas son el blanco perfecto para los extorsionadores ya que en su mayoría manejan efectivo y carecen de protección policial o privada, a diferencia de las grandes empresas.
LÍNEA DE TIEMPO DE ATAQUES. En abril y mayo, operativos policiales confirmaron la presencia de redes extranjeras vinculadas a este delito.
El 15 de abril, tres extranjeros, dos de ellos armados con granadas y cartas extorsivas, fueron capturados mientras exigían pagos a locales nocturnos. Semanas después, el 3 de mayo, la Policía allanó cuatro viviendas y detuvo a integrantes de la organización “Los gallos del Caribe”, sospechosos de extorsión, sicariato y narcotráfico.
Del Carpio explica que la situación es crítica: “Hay una lucha interna entre bandas por el control territorial”. Además, advierte que estas bandas criminales con una estructura criminal organizada de forma piramidal, con líderes, operadores y cobradores, no son solo pandillas improvisadas.
AUTORIDADES NO SE DAN A BASTO. Las críticas al Ministerio Público y al Gobierno regional no se hacen esperar. La falta de recursos tecnológicos y personal policial. “No hay número real de efectivos para combatir el problema”, recalca.
La unidad de investigación reconoce que Perú carece de convenios tecnológicos con plataformas digitales, lo que dificulta el rastreo de extorsionadores en tiempo real. Además, los bloqueadores de señal en penales como Socabaya no funcionan, permitiendo que internos sigan operando desde prisión.
RECOMENDACIONES. Del Carpio sugiere a las víctimas de extorsión denunciar de inmediato en la comisaría. También recomienda tomar precauciones de seguridad, como colocar cámaras en negocios y viviendas, y pedir resguardo policial.
Mientras tanto, las víctimas siguen esperando acciones concretas que frenen esta nueva forma de violencia que se apodera de los distritos, en los mercados y en los negocios de Arequipa.